versión móvil

domingo, 30 de diciembre de 2007

"...la iglesia invita a desterrar todo acto supersticioso."


Ahora resulta que en nuestro estado mexicano Querétaro, la superstición organizada llama a desterrar la superstición. Usar ropa interior roja, barrer la entrada, salir a correr con maletas y demás costumbres más bien divertidas en la noche de año nuevo son consideradas por la superstición religiosa...¡sí!, supersticiones. Visto de otra manera: sigue, fomenta, inculca y ejerce las supersticiones que me convienen ¡ninguna otra!

Pecan quienes usen calzones rojos.

Alfonso Romero Hernández

La Diócesis de Querétaro señala que la Iglesia católica no avala ninguna de esas tradiciones, y recomienda a sus feligreses no realizarlas
Por Fernando Paniagua
Querétaro, México (29 de diciembre de 2007).- Eso de las 12 uvas y un deseo por cada una, barrer dinero, echar a correr por la calle con las maletas para viajar en el año que comienza y hasta usar chones rojos podría no ser tan bueno si usted es católico.

De acuerdo con la Iglesia católica de Querétaro, todas esas "tradiciones y costumbres" que se realizan la noche del 31 de diciembre para recibir al nuevo año no son más que supersticiones que no se deben seguir porque es pecado.

El vocero de la Diócesis de Querétaro, José Morales Flores, sostuvo que la Iglesia católica no avala ninguna de esas tradiciones, y recomienda a sus feligreses no realizarlas, porque se alejan del verdadero sentido del fin de año.

"La Iglesia invita a desterrar todo acto supersticioso... La superstición consiste en quitar su lugar a Dios y dárselo a otros seres.

"El llamado de la iglesia es que no se deje llevar por esa tendencia, eso de las tradiciones de fin de año no tienen relación con el modo de vivir; no porque llevemos a bendecir el dinero el día último se va a multiplicar; eso es superstición", dijo el vocero diocesano.

En conferencia de prensa el también párroco de la iglesia de Santa Ana en la capital del estado sostuvo que la costumbre de otros católicos de llevar dinero a bendecir, tampoco debe ser considerado como un buen augurio, sino como una muestra de confianza en la Divina Providencia.

En tanto, en el semanario católico El Observador, en un artículo titulado "Mundo Supersticioso", se considera a estas costumbres una violación al primero de los 10 mandamientos que rigen la vida de los católicos.

"La superstición es un pecado contra el primer mandamiento de la Ley de Dios porque atribuye a cosas creadas (como las uvas, el dinero o los calzones rojos) unos poderes que sólo pertenecen a Dios", señala el semanario.


Copyright © Grupo Reforma Servicio Informativo

ESTA NOTA PUEDES ENCONTRARLA EN:
http://www.reforma.com/estados/articulo/840221/

Fecha de publicación: 28-Dic-2007

No hay comentarios.: